Pida un voluntario para hacer un juego rápido de atrapar el balón. Diga al voluntario que solo puede usar una mano para atrapar. Lance suavemente un bollo de papel al estudiante. Luego, hágale las siguientes preguntas:

• ¿Qué mano usaste para agarrar el papel?
• ¿Por qué usaste esa mano en lugar de la otra? (Si el alumno responde que es diestro o zurdo, pregunte qué significa).
• Si una de tus manos es la dominante o la más fuerte, ¿significa que tu otra mano es inútil o que no tiene valor? ¿Por qué sí o por qué no?

Recuerde a los estudiantes que todas las personas tienen fortalezas. Señale que todos también tienen algunas debilidades: sin embargo, al igual que la mano menos dominante, las debilidades no tienen por qué ser obstáculos. Diga a los estudiantes que identificarán sus propias fortalezas y que explorarán la relación entre fortalezas y debilidades.

Propósito: los estudiantes reconocen sus fortalezas personales participando en un juego que involucra la interacción grupal.

1. Los estudiantes escuchan las instrucciones del juego.

Distribuya copias de la hoja de actividades "Bingo" y dé tiempo a los estudiantes para que la revisen. Luego, dé las siguientes instrucciones:

• Muévanse por el salón y pídanles a sus compañeros de clase que escriban sus nombres en una casilla que describa una de sus fortalezas. Por ejemplo, si una casilla dice "Sabe nadar", busquen un compañero de clase que sepa nadar y pídanle que escriba su nombre en esa casilla.
• Su objetivo es hacer bingo. Eso significa que deben llenar cinco casillas seguidas de nombres. Las filas completadas pueden leerse de forma horizontal, vertical o diagonal.
• El nombre de una persona no puede estar en una fila ganadora más de una vez.
• Cuando hayan llenado una fila de nombres, griten: "¡Bingo!".
• Si escribieron su nombre en algo, se les puede pedir que lo prueben.
• Tienen cinco minutos para jugar.

2. Los estudiantes juegan.

Dígales que comiencen y permítales moverse libremente por el salón. Después de cinco minutos, sondee rápidamente a la clase para ver cuántos estudiantes están a solo una casilla del bingo. Decida si desea darles uno o dos minutos adicionales antes de finalizar el juego.

3. Los estudiantes analizan la actividad.

Pregúnteles si les resultó difícil obtener nombres para las distintas casillas. A medida que respondan, anímelos a respaldar sus respuestas con detalles y ejemplos. Permita que los estudiantes se desafíen entre sí. Por ejemplo, si un estudiante ha escrito su nombre en la casilla que dice "Habla más de un idioma", se le puede pedir que diga algunas palabras en otro idioma. Esto a menudo les brinda la oportunidad de presumir sus fortalezas y alienta aún más a la clase a generar confianza y una relación positiva.

Resuma la actividad observando que la hoja de actividades tiene 24 casillas diferentes y que cada una refiere a una habilidad o fortaleza distinta. Señale que todos tienen fortalezas, razón por la cual cada estudiante pudo escribir su nombre en al menos una casilla.

En caso de que un estudiante le reclame que no pudo escribir su nombre en ninguna casilla de la hoja, recuérdele a la clase que es imposible medir todas las habilidades y fortalezas que tienen las personas, en la hoja solo se enumeraron 24, que es un número pequeño. Si sigue presionando, diga al estudiante que cumplió el compromiso de estar en clase hoy y que cumplir los compromisos es una fortaleza muy valiosa.

Propósito: los estudiantes identificarán sus propias fortalezas y debilidades.

1. Los estudiantes identifican sus fortalezas personales.

Distribuya copias nuevas de la hoja de actividades "Bingo". Pida a los estudiantes que vuelvan a leer cada casilla y que piensen si menciona una de sus fortalezas o características. De ser así, pídales que escriban su nombre en la casilla. Si no, pídales que pongan una X en la casilla.

Señáleles que han comenzado a identificar sus fortalezas personales. Deles tiempo para agregar casillas adicionales que indiquen otras fortalezas o habilidades que tengan en la parte inferior de la tabla.

2. Los estudiantes identifican sus debilidades personales.

Explique que incluso las personas más talentosas y respetadas tienen debilidades o áreas en las que no sobresalen. Comparta una debilidad suya con la clase: tal vez usted no tenga la mejor ortografía, no pueda seguir una melodía o tenga problemas para memorizar cosas. Escriba su ejemplo en la pizarra.

Invite voluntarios a dar ejemplos de sus debilidades personales. Escriba sus respuestas en la pizarra. Si los estudiantes tienen dificultad para ofrecer ejemplos, dígales que consulten las casillas que dejaron en blanco en la segunda hoja de actividades del "Bingo". La lista de debilidades debe incluir solo algunos ejemplos.

Diga a los estudiantes que usen el reverso de su hoja de actividades para enumerar algunas de sus debilidades.

Propósito: los estudiantes identifican formas de usar las debilidades para su beneficio.

1. Los estudiantes exploran cómo convertir las debilidades en fortalezas.

Recurra a la lista en la pizarra y desafíe a los estudiantes a transformar estas debilidades en fortalezas. Ejemplifique el proceso de pensamiento usando primero su propio ejemplo. Por ejemplo, podría decir: "Tengo mala ortografía, así que tengo que revisar cuidadosamente lo que escribo. Pero cuando reviso, generalmente, también encuentro otros errores. Esto hace que mi redacción sea aún mejor de lo que podría ser si tuviera buena ortografía".

Asegúrese de que los estudiantes comprendan la técnica de cambiar sus actitudes para transformar una debilidad en una fortaleza. Explique que esta técnica les será útil durante toda su vida. Brinde ejemplos de situaciones en las que transformar una debilidad en una fortaleza es especialmente útil (por ejemplo, cuando alguien se burla de ellos: durante una entrevista).

2. Los estudiantes continúan compartiendo sus ideas en grupos pequeños.

Aliéntelos a pensar en formas en que una de las debilidades enumeradas en la pizarra se puede replantear como una fortaleza. Si no pueden transformar una debilidad razonablemente, centre el análisis en identificar formas de superarla.

Cuando la sesión de lluvia de ideas se haya completado, divida la clase en grupos de cuatro o cinco. Explique que, dentro de cada grupo, los estudiantes deben pensar en formas de transformar las debilidades que cada estudiante haya enumerado en el reverso de su hoja de actividades. Recuérdeles que, si no pueden encontrar formas de transformar una debilidad en una fortaleza, deben pensar en formas de superarla.

Sugiera que cada grupo designe a un voluntario para que tome notas sobre las estrategias creadas para abordar sus debilidades personales.

3. Los estudiantes comparten sus estrategias.

Invite a un voluntario de cada grupo a compartir algunas estrategias que el grupo desarrolló. Asegúrese de reafirmar los esfuerzos de los estudiantes y de alentar a que se apoyen las ideas de otros estudiantes.

Concluya el análisis señalando que saber en qué cosas uno no es bueno es en realidad una verdadera fortaleza. Las personas exitosas se centran en hacer lo que mejor saben hacer y se aseguran de trabajar con otras personas que son fuertes en las áreas en las que ellos son débiles. De esa manera, cada uno está haciendo lo que mejor sabe hacer.

Dé ejemplos de esta estrategia, como los siguientes:

• Los actores a menudo trabajan con asesores comerciales a quienes les pagan para administrar sus finanzas de manera eficiente.
• Los deportistas trabajan con entrenadores que tienen talento para elaborar estrategias.
• Los médicos se especializan en un área en particular y trabajan con otros especialistas para tratar a los pacientes de la manera más efectiva.

Pregunte a los estudiantes si este proceso fue fácil o difícil. Pídales que nombren algunas de las fortalezas de sus compañeros de clase. Obtenga los siguientes puntos clave que se enseñaron en esta lección:

• Todas las personas tienen fortalezas. Es importante que identifiquen sus propias fortalezas para que puedan concentrarse en usarlas.
• Todas las personas también tienen debilidades. Es importante que identifiquen sus debilidades para que puedan crear estrategias para superarlas o usarlas para su beneficio.
• Las personas exitosas y respetadas siempre pueden identificar tanto sus fortalezas como sus debilidades. Esto es lo que les permite centrarse en hacer lo que mejor saben hacer y en trabajar con otras personas que tienen fortalezas en las áreas en las que ellos son débiles.